La compañía china Beijing Tianbing Technology, conocida también como Space Pioneer, anunció que el cohete Tianlong-3 sufrió de un inesperado accidente durante uno de sus últimos ensayos estático.
Según lo informado, el lanzador ha salido impulsado de forma descontrolada mientras realizaba el citado ensayo, impactando pocos segundos después en una zona montañosa en las inmediaciones de la ciudad de Gongyi, ubicada en el centro del país.
El accidente habría sido provocado por un problema estructural y, a pesar de las llamativas imágenes del incidente que no han tardado en hacerse virales en las redes sociales, no ha habido que lamentar ningún herido, según informó la propia compañía a través de su perfil en la red social WeChat.
Las alarmas se encendieron después de que partes de la estructura del cohete cayeran dispersas dentro de la zona de seguridad que se había establecido, una medida necesaria en los ensayos de encendido de motores para evitar mayores consecuencias en caso de un posible accidente. La compañía continúa trabajando en la investigación para esclarecer lo ocurrido.