El enfrentamiento comenzó con ventaja para Melgar, que se adelantó a los 33 minutos gracias al gol de Bernardo Cuesta tras un resbalón de Garcés. Alianza Lima reaccionó vía penal convertido por Paolo Guerrero y la visita volvió a tomar ventaja en el segundo tiempo con anotación de Matías Lazo. Cuando todo parecía sentenciado en el estadio Alejandro Villanueva, un descuido defensivo y una salida errónea de Carlos Cáceda permitieron a Garcés empujar en el minuto 97 y declarar el 2-2 final.
El gol agónico de Renzo Garcés se gestó tras una pelota parada: la defensa de Melgar no reaccionó al rebote, y el central blanquiazul aprovechó la vulnerabilidad para mandar el balón al fondo del arco. “En la última jugada del partido… el central de Alianza Lima aprovechó el error de Cáceda y anotó el empate” señaló la crónica deportiva. Con esa acción, Alianza salvó un punto que parecía perdido.
Este empate cambia la perspectiva para ambos clubes: Melgar, al cerrar su participación de la temporada, suma una resistencia inesperada, mientras que Alianza Lima evita la derrota en casa y mantiene vida en la lucha por ubicarse mejor en la clasificación acumulada. “Este resultado no favoreció a ninguno” indicaban los análisis tras el silbato final.
El partido deja varias lecciones: la importancia de mantener concentración hasta el pitazo final, el valor de las jugadas a balón parado y una reiteración de que en el fútbol peruano los puntos pueden escaparse hasta en el último segundo. Con este operativo mérito, Alianza Lima celebró mientras Melgar se retiró con la sensación de derrota contenida.