A sus 40 años, Cristiano Ronaldo sigue desafiando el paso del tiempo. Según recientes mediciones realizadas por Whoop, empresa especializada en monitorización de salud, el astro portugués mantiene una edad biológica de 28 años y 11 meses, una cifra que él mismo calificó como "increíble".
En una prueba realizada por la compañía, que mide aspectos como frecuencia cardíaca, recuperación, esfuerzo físico y calidad del sueño, los resultados reflejaron lo que muchos en el mundo del fútbol ya sospechaban: el cinco veces ganador del Balón de Oro posee una resistencia y estado físico comparables al de un jugador en plena madurez deportiva.
Tras conocer los resultados, Ronaldo no tardó en bromear sobre su futuro en el fútbol: “Esto significa que jugaré al fútbol durante 10 años más”. La declaración, lejos de ser una simple ocurrencia, plantea la posibilidad de ver a CR7 compitiendo hasta los 50 años, un escenario impensado para la mayoría de los jugadores de élite.
Lo cierto es que su rendimiento no ha dado señales de declive. Esta temporada con Al-Nassr, en la Liga Profesional Saudí, ha sumado 23 goles y 3 asistencias en 28 partidos, mientras que en la Liga de Campeones de Asia, donde su equipo quedó eliminado en semifinales, acumuló 8 tantos en igual número de encuentros.
El caso de Cristiano Ronaldo evidencia el impacto de la preparación física y los avances tecnológicos en el deporte de alto rendimiento. La combinación entre disciplina, alimentación y entrenamiento específico parece haber extendido la carrera de jugadores que, en otro tiempo, habrían visto su retiro mucho antes.