Luis Advíncula volvió a abrir una de las heridas más profundas de la selección peruana: el repechaje perdido ante Australia rumbo a Qatar 2022. A tres años de aquella noche en Doha, el lateral de Boca Juniors hizo una reflexión descarnada, responsabilizándose por completo de la eliminación y liberando de culpa a Alex Valera, quien quedó marcado mediáticamente tras fallar en la tanda de penales.
En diálogo con “La Fe de Cuto”, Advíncula afirmó que él debía asumir la carga por ser uno de los jugadores con más recorrido en la selección. Recordó que su disparo pegó en el palo y salió en vez de cruzar la línea, un detalle mínimo que cambió la historia. Reveló también el impacto emocional que vivió: no durmió ni comió después del partido y solo encontró consuelo al reencontrarse con sus hijos en Argentina.
Durante la conversación, Cuto Guadalupe intentó aliviar la culpa del lateral, recordándole que incluso figuras legendarias fallaron en momentos decisivos. Pero Advíncula insistió en que aquella noche quedará grabada para siempre, y que, de haber convertido el penal, Perú habría logrado un hito histórico: clasificar a dos Mundiales consecutivos, “una locura” que el país estuvo cerca de celebrar.
Pese al dolor acumulado y a la reciente eliminación rumbo al Mundial 2026, Advíncula no descarta continuar en la selección. Con un proceso de recambio en marcha, podría ser uno de los referentes del próximo ciclo, aunque tendrá competencia directa en su puesto con jugadores como Oliver Sonne y Matías Lazo, quienes ya empiezan a consolidarse.
Aun así, el defensor se mantiene firme en su deseo de seguir luchando por la camiseta peruana. Reconoce que esa “mancha” lo acompañará siempre, pero también la considera un impulso para volver a intentarlo. Para Advíncula, la historia aún no está cerrada.