Mediante Oficio n.° 2193-2023-GRA/GRS, emitido el pasado 18 de octubre, el gerente regional de Salud de Arequipa, Walter Oporto Pérez, confirmó que el centro médico Santa Bárbara, ubicado en calle Los Zafiros F-4 (Cercado), no se encuentra registrado en el aplicativo Registro Nacional de Ipress (Renipress) de Susalud, entidad que autoriza al privado brindar el servicio médico. Pese a esto, dicho establecimiento opera con total normalidad sin control ni fiscalización de las autoridades.
Una denuncia efectuada por el ciudadano Marco Antonio Juárez ante la Fiscalía de Prevención del Delito de Turno de Arequipa, reveló que esta “clínica” desde su creación en el 2006, viene ejecutando labores médicas a la actualidad. No obstante, trabajarían en el ejercicio ilegal de la medicina previsto en el artículo 290 del código procesal, también infringe los artículos 125 y 438. Los denunciados son: Rodolfo Alarcón Pinto (responsable de la clínica) y Eleana Rodríguez Boluarte (representante legal).
“Los denunciados promocionan el centro médico, como un establecimiento hábil para realizar actividades médicas a sabiendas que no están autorizados para la realización de consulta médicas ni operaciones quirúrgicas, pues no tienen registro Renipress. Por estas falencias en el año 2015 se produjo la lamentable muerte de una persona”, detalló el denunciante.
INFRACCIONES. En la denuncia se detalla que desde el 4 de abril del 2017 el centro médico Santa Bárbara no cuenta con un código de habilitación para dicha práctica, pese a ello mediante sus redes sociales, sigue promocionando en la actualidad los servicios para intervenciones quirúrgicas, generando un potencial peligro.
“No solo operan en la ilegalidad, también inducen al error a los propios médicos que actúan creyendo que trabajan en un local habilitado y autorizado cuando no es así”, dijo.
En setiembre de 2023, la Gerencia de Administración Tributaria de la municipalidad de Arequipa tomó conocimiento del hecho, pero no ejecuta acciones directas para el cierre definitivo del local, que a principios se reconoció que no cumplía con los permisos básicos de Defensa Civil al no tener el Certificado de Inspección Técnica de Seguridad en Edificaciones (ITSE). Al parecer se durmió la entidad liderada por Víctor Hugo Rivera.