Las autoridades tacneñas se mantienen alertas ante el incremento en el caudal de los principales ríos a causa de las intensas lluvias ocurridas desde el último 2 de enero en las zonas altas de la región.
De acuerdo a informes del Proyecto Especial Tacna (PET), entidad encargada de la vigilancia de las diferentes estructuras de abastecimiento hídrico de la población tacneña, el río Caplina (uno de los principales afluentes de la región) en los últimos días pasó de 750 a 1400 litros por segundo.
El responsable de la meta de mantenimiento del PET, Beyker Nina Torres, indicó que este registro se realizó desde la bocatoma de Challata, ubicada a 1500 metros de altura en el distrito tacneño de Pachía. De igual forma, el especialista resaltó que antes del inicio de la temporada de lluvias en el lugar desembocaban entre 750 a 800 litros por segundo de agua y que además se realizaron trabajos de encauzamiento en prevención de desbordes, con apoyo del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento a un kilómetro aguas arriba y 500 metros aguas abajo.
El agua de este río es destinada para los pobladores de la Junta de Usuarios del Bajo Caplina y, en tiempos de emergencia, la Empresa Prestadora de Servicios de Tacna tiene licencia para captar hasta 100 litros por segundo del recurso hídrico.
MANTENIMIENTO. En la actualidad, el Proyecto Especial Tacna controla el caudal de la bocatoma de Chuschuco (Uchusuma) y la bocatoma de Challata (Caplina) para asegurar el abastecimiento de agua para la población y agricultura.
Las autoridades tacneñas indicaron que se mantendrá la vigilancia de la infraestructura hídrica ante los reportes en el incremento de precipitaciones en las zonas altas del país.