El Cuerpo Médico del Hospital Regional de Moquegua expresó su rechazo al recorte de 40 plazas CAS y a la anulación del concurso CAS N.° 11, medidas que —según denunciaron— ponen en riesgo la atención de miles de pacientes. A través de un pronunciamiento público, los profesionales alertaron que la decisión del Gobierno Regional de Moquegua afecta directamente al personal indispensable para el funcionamiento del principal nosocomio de la región.
Los médicos denunciaron además un presunto uso indebido del presupuesto del hospital, señalando que durante los años 2024 y 2025 los recursos destinados a salud habrían sido utilizados para cubrir planillas administrativas del propio Gobierno Regional. “La salud de Moquegua no puede seguir siendo la caja chica del Gobierno Regional”, expresaron con firmeza, advirtiendo que esta situación pone en riesgo la atención oportuna de pacientes.
En su pronunciamiento, el cuerpo médico exigió al gerente regional de Salud, Juan Luis Herrera Chejo, y al director del nosocomio, Otto Suárez, asumir una defensa real del establecimiento. “Su obligación es proteger la operatividad del hospital y no permitir el debilitamiento progresivo de nuestras capacidades”, indicaron, remarcando que la reducción de plazas atenta directamente contra la atención especializada y de emergencia.
Finalmente, los profesionales de la salud hicieron un llamado directo a la gobernadora regional de Moquegua, Gilia Gutiérrez, exigiendo coherencia entre el discurso político y la realidad presupuestal.