En la última década, el Perú experimentó un espectacular crecimiento en la exportación de arándanos. Lo que comenzó con un modesto registro de $32 millones en exportaciones en 2010, alcanzó en 2023 una cifra récord de $1679 millones, consolidando al país como el mayor exportador mundial de este fruto.
Estados Unidos, la Unión Europea y Asia se han convertido en los principales destinos de este “oro azul”, apreciado por sus propiedades antioxidantes con alto contenido de vitaminas y fibra. Así lo señala el reciente reporte de la Asociación de Exportadores (ADEX).
Aunque su participación aún es pequeña en comparación con las grandes regiones productoras del norte, como Lambayeque, Piura y Áncash, su potencial es inmenso. Moquegua ya se ha posicionado como la principal región productora del sur y la sexta a nivel nacional, aportando el 0.4% de la producción total del país.
Las condiciones agroclimáticas de Moquegua la colocan en una posición estratégica para este cultivo. Su suelo fértil y la disponibilidad de agua proporcionada por la presa Pasto Grande permiten que los agricultores locales obtengan arándanos de excelente calidad, con características como un mayor tamaño y sabor que los hacen competitivos en los exigentes mercados internacionales.