Lima. Tal y como lo anunció, el congresista de Renovación Popular, Jorge Montoya, presentó un proyecto de ley para desvincular al Perú de la Convención Americana de Derechos Humanos (CADH), mediante la denuncia del tratado que ratificó el Estado. Esto generó críticas por legisladores que incluso señalaron que se pone por encima del Ejecutivo porque la decisión compete exclusivamente a la presidenta.
La iniciativa se da tras los informes internacionales sobre las muertes en las protestas que concluyen que hubo ejecuciones extrajudiciales. Conclusión que fue tajantemente rechazada por Montoya.
Tras ello, vociferaba que el organismo internacional estaba sesgado y tomado por personas con ideologías extremistas.
Montoya argumentó su proyecto con las sentencias polémicas de la CADH que anulaban condenas a personas vinculadas al terrorismo.
Además, en sus premisas señalan que lo que lograría si se desvinculan de la CADH es legislar con libertad y soberanía sobre la regulación de la aplicación de la pena de muerte para delitos como el sicariato, la violación de menores, el terrorismo y el feminicidio.
CRÍTICA. Una de las parlamentarias en responder a Montoya fue Sigrid Bazán, quien señaló que esta iniciativa está imponiéndose al Ejecutivo. “Es otra forma de que el Congreso se ponga por encima y no es una competencia de poderes (...) Este proyecto puede ser declarado inconstitucional”, refirió.