Las autoridades estadounidenses han informado este viernes de que han lanzado un “ataque masivo” contra objetivos de Estado Islámico en Siria, en respuesta al ataque perpetrado durante el fin de semana pasado en la provincia siria de Palmira que se saldó con la muerte de tres estadounidenses, incluidos dos militares.
“Tropas estadounidenses han iniciado un ataque a gran escala contra la infraestructura y los depósitos de armas de Estado Islámico en Siria. Este ataque masivo se produce tras el del 13 de diciembre contra fuerzas estadounidenses y aliadas”, ha anunciado el Mando Central de Estados Unidos a través de su perfil en la red social X.
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, ha indicado que la operación, denominada ‘Ataque ojo de halcón’, “no es el comienzo de una guerra, sino una declaración de venganza”. “Hoy hemos perseguido y matado a nuestros enemigos. A muchos. Y seguiremos haciéndolo”, ha celebrado.
Así, ha asegurado que Estados Unidos, bajo el liderazgo de Donald Trump como presidente, “nunca dudará ni cederá en la defensa” del pueblo estadounidense. “Como dijimos inmediatamente después del salvaje ataque, si atacas a los estadounidenses —en cualquier parte del mundo—, pasarás el resto de tu breve y ansiosa vida sabiendo que Estados Unidos te cazará, te encontrará y te matará sin piedad”, ha expresado.