Su palabra preferida es esfuerzo. Emilio Daza Vigo nació y creció en la región Amazonas. Ha obtenido una beca completa para estudiar Economía, Neurociencia y Matemáticas en el Dartmouth College, una de las mejores universidades de EE. UU
Es un logro que lo enorgullece. Superó el proceso de selección en el que participaron 28,000 postulantes de diferentes partes del mundo. “Me esforcé muchísimo. Creo que no basta con tener talento para lograr las cosas, saqué la mayor ventaja de mis habilidades y mis hábitos para lograr lo que hace años parecía imposible”, dijo Emilio al comentarnos los desafíos que afrontó durante su etapa de preparación.
Él tenía claro un objetivo: formarse en el extranjero. Fueron la perseverancia, la ambición y la esperanza para generar un cambio en su vida el motor para forjar sus logros. Y vaya que tuvo que remar contracorriente y a brazo partido.
En un momento de la conversación, nos confiesa que en su niñez sufrió bullying y poca valoración por parte de muchas personas.
“No fui estimado como debía. Sin embargo, eso me dio una mayor fortaleza para creer en mí, aunque el resto estuviese en contra”, añadió.
Resaltó que sus padres son la piedra angular en su desarrollo personal y académico.
“Mis padres me ofrecieron el espacio para discutir dilemas sociales y cuestiones académicas que me impulsaron a desarrollar un pensamiento crítico, han creído en mí. Mi familia viene de contextos vulnerables y conocer su historia de resiliencia me ha inspirado para demostrarme que sí se puede”, recalcó.
Culminó la secundaria en el Colegio de Alto Rendimiento (Coar) de Amazonas. La carga académica significó un reto para Emilio por el poco tiempo que tenía para hacer muchas cosas, especialmente en el programa del Bachillerato Internacional del Coar. Sin embargo, esto representó una oportunidad para fortalecer valores esenciales como la disciplina, la perseverancia y la dedicación.
“Me dijeron muchas veces al inicio de este viaje de mi vida, por ejemplo, que no lograría lo que quería, pero siempre me mantuve convencido de que lo iba a conseguir”, manifestó. Hoy, a los 18 años, le ha dado una lección a quienes no creyeron en su proyecto de vida.
F/Andina