Son cuatro balaceras que presenciaron los comerciantes del terminal del Club del Altiplano (Gratersa). El tiroteo ocurrido frente al centro comercial, el último jueves, el objetivo eran dos meretrices que se desplazaban cerca a los hoteles. Las mujeres apenas escaparon de lugar, luego de los disparos los facinerosos El presidente de Gratersa, Marcelo Flores, exigió a las autoridades locales y policiales, la planificación de trabajo y exigir estado de emergencia.
“Pedimos a los altos oficiales planificar medidas para acabar con tanto atentado”, mencionó. Siendo un centro comercial que reactiva la economía, la medida no les afectaría en sus ganancias. El dirigente refiere que el toque de queda es de noche y sus locales ya están cerrados.
Flores señaló que las balaceras no solo suceden en la ciudad sino a nivel nacional y exigió a los congresistas corregir las leyes porque Arequipa se volvió tierra de nadie.
Por su lado, los comerciantes instalaron cámaras de seguridad en la parte interna y externa del establecimiento, la vía cercana a este local era invadido por meretrices que esperaban en las esquinas, pero desde el tercer atentado, ellas dejaron el lugar.
Los comerciantes percibieron el tiroteo y temen que esta se aloje en el cuerpo de transeúntes.
“Nadie sabe en segundos lo que puede pasar, son más de quince balas es un ratito”, mencionó el dirigente. Además, este tipo de hechos a alejado a algunos vendedores y clientes. Son 743 asociados de los cuales trabajan 350.
“La gente dice en Gratersa hay balacera y las personas nos ven como extraños”, narró.
A pesar de operativos y patrullajes, las balaceras no cesan y temen que los actos delincuenciales sean más recurrentes, por ellos los comerciantes y visitantes piden operativos a hospedajes para eliminar la prostitución de la zona.