Sedapar presentó el proyecto de cosecha de agua en la comunidad campesina de San Juan de Tarucani, situada en la cabecera de cuenca del río Chili. Este consiste en la construcción de 17 qochas (microrreservorios) para almacenar agua de las lluvias y filtrarla por canales que la conducen hacia zonas ganaderas. La presentación fue ayer en la zona rural.
El alcalde del distrito San Juan de Tarucani, Floro Choque Vilca, saludó el proyecto de la entidad prestadora de servicio de agua potable, pero cuestionó que la empresa ejecutora no utilizó los materiales idóneos en la construcción de los diques (muros gruesos) de tierra y piedras, que separan la qocha de la zona de irrigación.
“Han utilizado material filtrante con lo que han encontrado solo en el área. Han debido usar la arcilla, teniendo en cuenta que están trabajando con recurso hídrico. Si llueve fuerte puede que arrase con toda la construcción y todo quede plano. Deberían haber realizado un estudio más extenso de estas zonas hidrográficas”, explicó.
La autoridad edil, aunque reconoció que su opinión no se basa en una asesoría técnica sino en su experiencia como poblador y autoridad, advirtió que el 60% de diques podrían ceder ante la inclemencia de las lluvias en este centro poblado, ubicado en la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca.
EJECUCIÓN. El proyecto de Sedapar, elaborado bajo el mecanismo de retribución por servicios ecosistémicos hídricos (Merese-H), se ejecuta junto al Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) y la empresa ejecutora Desco. En julio del año pasado se entregó dos qochas a las comunidades campesinas de San Juan de Tarucani y Huayllacucho. Ahora se presentó el resto de microrreservorios construidos por Sedapar.
El proyecto cuenta con un presupuesto de 7 millones de soles que incluye la construcción de 1600 metros lineales de cercos excluidores, dos talleres de capacitación y medidas de remediación. El dinero proviene del 1.4 % del monto del recibo de agua de cada usuario de la ciudad de Arequipa, pues con el trascurso de los años se espera que las aguas de estas localidades discurran hasta la represa de Aguada Blanca, que abastece al 90 % de la población de Arequipa metropolitana.
De oto lado, el presidente de la comunidad campesina, Leopoldo Choque, recomendó que también deberían construirse espejos de agua (estanques en reposo para líquido).
“Actualmente contamos con 20 espejos, pero necesitamos si quiera contar con 30 más”, dijo.