Escribe: María Coaguila Torres
Desde el 3 de junio hasta el 26 de septiembre, los ciudadanos podrán adquirir los kits electorales de revocatoria, necesarios para iniciar el proceso para retirar de sus cargos a las autoridades de su distrito. La solicitud debe ser presentada de manera presencial de lunes a viernes, en el horario de 8:30 a 16:30 horas, o de lunes a domingo a través de la mesa de partes virtual de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE).
Los interesados para adquirir los kit de revocatoria deberán cumplir con los siguientes pasos. Realizar un pago de 85.70 soles al Banco de la Nación o a través de la plataforma https://pagalo.pe/ utilizando el código 3830. Con el váucher, apersonarse a la única oficina ubicada en la urbanización La Perlita 112 (Cercado de Arequipa) para solicitar y llenar el formulario TB5, compuesto por 5 hojas. A partir de nueve días después de presentarlo, se entregarán los planillones de revocatoria.
A nivel nacional, existen 20 oficinas descentralizadas y la sede central
La supervisora de la ONPE, Brenda López, destacó: “El kit lo puede comprar cualquier ciudadano, siempre y cuando su domicilio sea en el lugar donde se encuentra la autoridad”.
REQUISITOS PARA LA REVOCATORIA. La ley de los Derechos de Participación y Control Ciudadanos fija requisitos para este fin:
- Las causales de vacancia o suspensión y los delitos no pueden ser invocados para sustentar los pedidos de revocatoria.
- La consulta se lleva adelante en cada circunscripción electoral si la solicitud está acompañada del veinticinco por ciento 25% de las firmas de los electores de cada circunscripción y admitidas.
- Para revocar a una autoridad se requiere la mitad más uno de los votos válidos. Para que proceda la revocatoria deberán haber asistido por lo menos el 50% de los electores hábiles del padrón electoral.
Cabe precisar que, algunas de las razones que se pueden alegar para solicitar las revocatorias son: incumplimiento de planes de gobiernos o promesas electorales, mala gestión de gobierno, desinterés o negligencia por parte de la autoridad, entre otros.