El profesor Yovani Colque Mamani, más que docente, se ha convertido en un segundo padre para los 11 niños del colegio Eduardo López de Romaña que tiene a su cargo en el anexo de Catas, distrito de Punta de Bombón.
Él tiene una mototaxi y vive en la zona de Alto La Punta, que está ubicado a 30 kilómetros de la institución educativa. Todas las mañanas se traslada hasta su colegio, pero no va solo, ya que lleva a varios de sus estudiantes que viven en el mismo lugar.
Cuando llegó en el año 2016 solo había dos alumnos, pero poco a poco los padres de familia de Catas observaron su dedicación con los niños y los trasladaron de otros planteles.
Hoy en día tiene 11 menores con los que ha estrechado lazos de familia más que de profesor y estudiante.
Su esposa también trabaja en el mismo anexo como profesora de inicial, así juntos se preocupan que los niños crezcan en medio de valores que se han ido perdiendo como el respeto, solidaridad, responsabilidad y otros.
Edwin, de 7 años, es vecino del docente en Alto La Punta. Se levanta temprano y a las 7:30 está en la puerta para ir al colegio. Suele llamar insistentemente al profesor para acudir al plantel y al regresar es el último en llegar a su casa.
Sus papás trabajan en el campo, por eso el docente lo cuida y se asegura que llegue sano y salvo.
La niña Unice tiene 6 años y es otra de sus alumnas. En este caso la madre de la menor confía en el profesor porque todas las tardes la deja donde ella se encuentra, puesto que no siempre se encuentra en el mismo lugar, ya que trabaja en las chacras, pero sabe que el maestro Yovani llevará a su pequeña hasta donde ella se encuentre.
La seguridad es una de sus principales preocupaciones, por ello en las tardes, a la hora de salir del colegio, lleva a los niños hasta donde estén sus padres, ya que la mayoría de veces están en las chacras trabajando.
El profesor Yovani es uno de los pocos docentes que tiene vocación de servicio y tiene clara la responsabilidad para contribuir con la formación de los futuros ciudadanos, por ello no escatima en poner todo de su parte para cumplir con esa tarea. El traslado de los niños en su mototaxi es solo una muestra de su gran corazón y desprendimiento con los menores.