Desde las 10:00 horas de este 22 de agosto, pescadores artesanales del distrito de Quilca, provincia Camaná, iniciaron un paro indefinido desde el óvalo de Quilca. Esta medida de protesta responde a la situación de la pota (calamar gigante), el principal recurso de extracción de la pesca artesanal en el sur del país.
Cansados de ser ignorados por el Gobierno, los pescadores decidieron bloquear los accesos a la zona. Denuncian la falta de políticas claras para la defensa de este recurso vital y la presencia amenazante de embarcaciones industriales que están diezmando la población de pota.
“Estamos en pie de lucha, no se levantará la medida hasta que el Estado atienda nuestras demandas y garantice condiciones justas para la pesca artesanal”, señalaron los dirigentes de los pescadores en Camaná.
Asimismo, los pescadores exigieron la renuncia del titular del Ministerio de Producción (Produce), Sergio González, por la falta de políticas claras para la defensa del recurso marino que se encuentra en riesgo.
El paro ha generado preocupación en la zona por la interrupción del tránsito y el impacto económico que puede ocasionar a corto plazo.
Meses atrás, pescadores de Caraveli y Quilca (Camaná) denunciaron que unidades asiáticas depredaban los recursos, como el erizo rojo.