Los mineros artesanales de Arequipa anunciaron su rechazo rotundo al paro convocado por algunos sectores de la minería informal, y optaron por impulsar mecanismos técnicos y diálogo con el Ministerio de Energía y Minas (Minem) para acelerar un proceso de formalización que, aseguran, ya está suficientemente respaldado. Según los dirigentes locales, la movilización solo generaría tensión social y no resolvería los retrasos administrativos
“Los paros no solucionan nada. Lo que necesitamos es trabajo técnico, no medidas electorales”, señaló Nilson Flores Suárez, vocero de la Federación de Mineros Artesanales de Arequipa. Con ese argumento, descartaron adherirse a los bloqueos y exigieron que las autoridades aceleren la revisión de expedientes. Asimismo, aseguran que el llamado a la paralización no respondería a una verdadera necesidad, sino a intereses externos.
Según Suárez, el Estado es incapaz de evaluar miles de expedientes transferidos desde los gobiernos regionales. Esta sobrecarga, sumada a cambios de autoridades, retrasa el proceso a pesar de que los mineros cumplieron con presentar sus requisitos.
El grupo de mineros artesanales sostiene que la ampliación del plazo para completar la formalización no debe ser motivo de paro, sino una oportunidad para mejorar los procesos administrativos y garantizar legalidad y sostenibilidad en la actividad minera, sin perjudicar el tránsito, la economía regional, ni la imagen del sector.
“Nosotros queremos formalizarnos, no paralizar el país”, indicó.
SOLUCIONES. Tras la llegada del director de Formalización Minera del Minem, Máximo Gallo, se pudieron reactivar las mesas de diálogo y abrir una agenda con soluciones que destraben los expedientes y aceleren el proceso de formalización.
Entre estas se encontrarían evaluaciones grupales y conjuntas para optimizar recursos y acortar tiempos, y la aplicación del silencio administrativo positivo, que aprobaría automáticamente los expedientes al no cumplir los plazos de respuesta.
Aseguran que estas medidas son legales, viables y fundamentales para evitar que la formalización siga estancada indefinidamente, como lo ha estado por más de una década.
La meta sería tener a los mineros formalizados en diciembre. Esperan que Arequipa, al tener más de 11 mil mineros en proceso de formalización, tenga una atención prioritaria, sin presiones políticas o protestas.
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