A veintiún días de la declaratoria de emergencia por contaminación hídrica en Islay, alrededor de 1190 familias aún no son abastecidas con agua potable y siguen consumiendo el recurso hídrico contaminado con arsénico, mercurio y boro proveniente del río Tambo en el distrito de Cocachacra.
El subgerente de Gestión de Riesgos y Prevención de Desastres de la Municipalidad Distrital de Cocachacra, Jheyson Jiménez Cano, explicó que hasta la fecha entregaron agua apta para el consumo humano, mediante dos cisternas, solo al 30 % de la población es decir ,a 510 familias que viven en la jurisdicción.
Jiménez Cano precisó que en un principio el Gobierno Regional de Arequipa (GRA) se comprometió a enviar una cisterna diaria, sin embargo, esto nunca se cumplió. Como consecuencia la población están inconforme con estas medidas e incluso se rehúsan a recibir el elemento vital.
“Nosotros necesitamos una cisterna diaria porque tenemos bastantes lugares. Hoy día nos ha alcanzado para una parte de la pascana pero nos faltan los anexos como el Carrisal, Chucarapi, Pampa Blanca” señaló preocupado Jiménez Cano.
ABASTECIMIENTO. El pasado miércoles 14 de agosto, la municipalidad de Cocachacra entregó agua potable mediante una cisterna que tiene una capacidad de cuatro mil galones a los habitantes del asentamiento humano Veracruz. Mientras que el martes 20 de agosto, abastecieron el recurso hídrico de un tanque que tiene un volumen de 17 mil litros a los residentes del anexo de El Toro.
Ante este panorama, Jiménez Cano considera que a este ritmo se complicará abastecer a toda la población de Cocachacra, ya que por familia entregan 120 litros de agua. Por su parte, los demás ciudadanos se abastecen de una planta de tratamiento de Sedapar, la cual solo eliminaría el arsénico pero no el boro y otras sustancias químicas.
MEDIDAS TEMPORALES. El funcionario mencionó que la segunda etapa del proyecto del Centro de Operaciones de Emergencias Regionales (COER) –Arequipa consiste en que les envíen bladers (tanque flexible que permite almacenar gran cantidad de agua) de cinco mil galones que estarán ubicados estratégicamente en cada anexo. La tercera etapa consiste en la instalación plantas móviles de osmosis inversa de purificación de agua a cada anexo.
Por último, señaló que estas estas medidas deben cumplirse durante la declaratoria de emergencia que tiene vigencia hasta el 1 de octubre del presente año. No obstante, las autoridades no dieron fechas exactas para que se cumpla cada etapa.