Mientras a diario, los peruanos fallecen en manos de criminales, el Ministerio del Interior encargado de mantener el orden, sumerge la cartera en una crisis institucional por las recientes destituciones, renuncias y falta de liderazgo.
El ministro del Interior, Víctor Torres Falcón, cada vez se queda solo. En menos de 24 horas, cuatro de sus funcionarios renunciaron, entre ellos sus asesores de confianza.
Se trata de Héctor Loayza Arrieta (viceministro de Seguridad Pública), Martín Severo Parra Saldaña (asesor del Despacho Viceministerial de Orden Interno), Luis Enrique Goytizolo Fuentes (director general de la Oficina de Infraestructura) y Enrique Luis Blanco Ridoutt (asesor de confianza). Todos argumentaron que su dimisión es por razones personales.
Esto se da tras la destitución de Jorge Angulo como Comandante General de la Policía y otros cambios, tras la agresión a la presidenta Dina Boluarte en Ayacucho. Dichas acciones fueron calificadas de arbitrarias e ilegales.
Además, antes de la renuncia de Blanco Ridoutt, él y Torres Falcón, habrían discutido en el cuarto piso del edificio Corpac, en San Isidro, sede del Mininter. Allí, el ministro reclamó a Blanco por los cambios, la resolución de cese de Angulo y otros temas que no favorecieron a su ministerio. Recordemos que en la resolución de destitución de Angulo, argumentaron su salida calificándolo de negligente y aceptando el fracaso de los estados de emergencia.
La falta de liderazgo y poco respeto a la Policía se reflejó cuando Torres Víctor no asistió a la toma de mando de Víctor Zanabria como reemplazo de Angulo, según el parlamentario Roberto Chiabra.
Ahora desde el Congreso, congresistas de Avanza País, Renovación Popular, Perú Libre, piden la renuncia o destitución de Torres Falcón.