El ministro del Interior, Vicente Tiburcio, informó en rueda de prensa que encargó al general de la Policía Óscar Arriola, la formulación la formulación de un proyecto de ley que modifique el régimen disciplinario policial, con el propósito de permitir la expulsión inmediata de efectivos involucrados en actos de corrupción o vinculados a la criminalidad, garantizando una institución íntegra y confiable.
“La Policía limpia su casa todos los días, pero necesitamos un régimen disciplinario más fuerte”, señaló Vicente Tiburcio, subrayando que los operativos internos ya están en marcha para detectar a los malos elementos.
El titular del sector anunció la reestructuración de la Policía Nacional del Perú (PNP) con el objetivo de reforzar las estrategias de seguridad ciudadana. Indicó que desde ayer todo el alto mando policial fue dispuesto para realizar un trabajo uniforme y coordinado desde Tumbes hasta Tacna, priorizando la inteligencia y la investigación criminal como ejes principales del nuevo plan de acción.
En ese contexto, Tiburcio explicó que el plan busca fortalecer la prevención del delito mediante el uso de la ciencia, la técnica y la estrategia policial, además de mejorar la cooperación con el Ministerio Público para asegurar investigaciones sólidas que permitan sancionar a los responsables. Recalcó que esta coordinación será clave para enfrentar la inseguridad de manera sostenida.
Asimismo, el ministro afirmó que se evaluarán los cuadros de inteligencia e investigación para seleccionar a los agentes más capacitados, quienes serán sometidos a pruebas de polígrafo antes de asumir funciones especializadas. Reconoció que las unidades de inteligencia han sido descuidadas y requieren recursos, vehículos y mejoras de infraestructura, por lo que se está trabajando en una asignación presupuestal que fortalezca la capacidad operativa y tecnológica de la PNP.
Finalmente, Tiburcio anunció la creación de equipos especializados para la captura de prófugos de alto valor, especialmente en las llamadas “zonas rojas” del país, y la habilitación de la línea 111 para denuncias ciudadanas. “Vamos a tener una respuesta inmediata frente a un problema y una reacción frente a cada acción criminal”, expresó, asegurando que no habrá protección para ningún funcionario o miembro de la Policía implicado en actos ilícitos, en el marco del compromiso del Gobierno de enfrentar la inseguridad con “valentía, coraje y disciplina”.