Luego de 440 días de gestión, Alberto Otárola decidió renunciar al cargo de titular de la Presidencia de Consejo de Ministros por los escándalos de los audios con Yaziré Pinedo. En su lugar la presidenta Dina Boluarte juramentó a Gustavo Adrianzén, quien hace unos días era representante del Perú ante la Organización de los Estados Americanos. La mayoría del Congreso dio el visto bueno y es probable que le otorguen la cuestión de confianza.
Las principales críticas partieron de un sector de parlamentarios de izquierda como Cambio Democrático y Perú Libre, que recordaron cuando Adrianzén se alteró y culpó a los fallecidos en las protestas de finales del 2022 e inicios del 2023. El legislador Flavio Cruz manifestó que el flamante premier debe ‘reconciliarse’ por sus dichos, pero en su carrera no tiene cosas negativas. Mientras que su colega Margot Palacios dijo que no estaba de acuerdo con la designación y votará en contra de la cuestión de confianza.
Mientras que desde Fuerza Popular, Alianza para el Progreso respaldaron la designación, pero indicaron que debe conversar con los parlamentarios y mostrar su disposición para llegar a consensos.
El flamante primer ministro dio sus primeras declaraciones a la prensa donde indicó que sus prioridades serán la lucha contra la criminalidad y reactivación de la economía. Además no descartó cambios en su gabinete, es menester precisar que los congresistas criticaron que no haya removido al titular del Interior, Víctor Torres.
“El que habla, de acuerdo al mandato constitucional, le corresponde concurrir ante el Congreso de la República para el denominado acto de investidura y ahí presentaremos la política general del Gobierno, que no hará sino enfatizar y reforzar aquello que se viene realizando”, alegó Adrianzén.
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