El empresario tecnológico Elon Musk volvió a sacudir el debate global al afirmar que, debido al acelerado avance de la inteligencia artificial y la robótica, trabajar dejará de ser una necesidad entre cinco y diez años. Durante el Foro de Inversiones de Arabia Saudita, el multimillonario sostuvo que el empleo será una actividad voluntaria, comparable a practicar un deporte o jugar videojuegos, y que las personas lo realizarán solo por gusto y no por obligación económica.
Musk explicó que este futuro laboral será similar a la diferencia entre comprar alimentos en el supermercado y cultivarlos en casa: más complejo, pero elegido por satisfacción personal. Sin embargo, reconoció que aún “hay mucho trabajo por hacer” antes de alcanzar ese punto. En la misma intervención, el empresario lanzó otra afirmación disruptiva: el dinero, tal como se conoce hoy, desaparecerá debido al desarrollo de la IA, aunque persistirán limitaciones físicas como la energía y los recursos materiales.
Las proyecciones del magnate coincidieron con las declaraciones de Jensen Huang, director ejecutivo de Nvidia, quien aseguró que los trabajos y los procesos de aprendizaje cambiarán radicalmente. Señaló que actividades rutinarias, arduas o complejas serán simplificadas gracias a la inteligencia artificial, lo que modificará por completo la productividad humana y los modelos educativos.
Musk también se refirió al futuro de la robótica humanoide y afirmó que, aunque actualmente no existen robots verdaderamente funcionales, Tesla está desarrollándolos y su llegada marcará un punto de quiebre histórico. Aseguró que estos dispositivos se convertirán en el producto más demandado del mundo, superando incluso a los teléfonos móviles, con presencia masiva tanto en hogares como en industrias.
Para el fundador de Tesla, la producción global de robots humanoides generará una revolución económica y social sin precedentes, en la que las máquinas asumirán tareas humanas y redefinirán por completo la vida cotidiana. Tanto él como Huang coinciden en que el impacto será irreversible y transformará la manera en que la humanidad trabaja, aprende y se organiza, abriendo un escenario que hasta hace poco parecía ciencia ficción.
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