“Ferretería yo no conozco, somos pobres. Nosotros comíamos arroz con camote”, indica entre lágrimas la esposa de José Suárez, un adulto mayor en situación de pobreza extrema, quien habría sido usado como proveedor del Ministerio de Cultura y ser supuesto propietario de una ferretería que recibió 200 mil soles del Estado. Por este caso, la ministra Leslie Urteaga es investigada por la Fiscalía y enfrenta una acusación penal por colusión agravada.
El hecho se revela tras un informe de la Contraloría sobre la adquisición sobrevaluada de hitos de concreto de señalización para la delimitación de sitios arqueológicos prehispánicos para la dirección general de patrimonio arqueológico inmueble en el 2018. En esa fecha, Urteaga era directora general de Defensa del Patrimonio Cultural (DGPA).
Según aparece en documento, el adulto mayor cobró indebidamente 27 500 soles por la construcción de los citados hitos, pero don José recordó, a las cámaras de Willax TV, que solo cobró 180 soles por ese trabajo (60 soles por día).
La Fiscalía argumenta que junto a Urteaga Peña, se habría coludido con cuatro funcionarios para defraudar al Estado: Ausejo Castillo, Laura Montes de Oca Rivera, Luis Espinoza Gálvez y José Salcedo Quispe.
El adulto mayor culpa a Espinoza Gálvez, quien en ese año se desempeñaba como coordinador de administración a nivel nacional de la DGPA. Él se encargaba de hacer firmar documentos a don José Suárez e incluso le tramitó el RUC, así como la tarjeta del banco con la que cobraba el dinero del Ministerio de Cultura.
Ante la denuncia periodística, la funcionaria Urteaga indicó que no conoce al adulto mayor y culpó a Espinoza Gálvez de aprovecharse de don José. Además, señaló que ella no participó en la adquisición de los hitos de concreto y que fue incluida en la investigación de manera ‘incidental’.
Fuentes del Gobierno señalan que Urteaga es inamovible del cargo por la exrelación sentimental con Morgan Quero, actual jefe del gabinete de asesores de la presidenta Dina Boluarte.