Escrito por: Annel Aguilar Zambrano
El médico cirujano Mario Cabani Ravello visitó en múltiples ocasiones la residencia presidencial para atender personalmente a la mandataria Dina Boluarte, según reveló la exsecretaria de la Presidencia, Patricia Muriano, ante la Segunda Fiscalía Anticorrupción. Los ingresos, que se habrían extendido hasta marzo de 2024, se realizaban por una puerta lateral sin vigilancia protocolar ni registro en el Portal de Transparencia.
Muriano declaró bajo juramento que Cabani accedía directamente a la residencia y realizaba procedimientos médicos relacionados con “la aplicación de vitaminas” a la jefa de Estado. El médico siempre estaba acompañado por una enfermera, primero una mujer llamada Reyna y luego otra de mayor edad identificada como Nelly Romero.
Las visitas se hacían por la puerta número 6 de Palacio de Gobierno, un ingreso reservado que ha sido cuestionado en investigaciones anteriores por permitir entradas sin dejar rastro oficial. Este acceso discreto, sumado al silencio del Ejecutivo sobre los tratamientos recibidos por Boluarte, encendió las alarmas del Ministerio Público sobre un posible caso de tráfico de influencias o uso indebido de recursos estatales.
La Fiscalía Anticorrupción investiga si los servicios estéticos recibidos por la mandataria estarían vinculados a beneficios políticos otorgados desde el Ejecutivo. Por ahora, el testimonio de la exsecretaria Muriano se ha convertido en una pieza clave en una investigación que amenaza con involucrar aún más al entorno presidencial