El presidente encabezó este fin de semana un amplio operativo de seguridad en el distrito de Independencia, donde cientos de agentes de la Policía Nacional fueron desplegados como parte de una estrategia para reforzar el control territorial y combatir la criminalidad en Lima Norte. La intervención incluyó patrullajes, controles de identidad y acciones preventivas en zonas consideradas de alto riesgo.
Durante su recorrido, el mandatario visitó la comisaría de Tahuantinsuyo para supervisar las condiciones de trabajo del personal policial y evaluar la logística disponible. Posteriormente, se trasladó al centro de monitoreo de la Municipalidad Distrital de Independencia, donde sostuvo reuniones con autoridades locales y verificó en tiempo real el despliegue de los efectivos en las calles.
En un mensaje contundente, el jefe de Estado afirmó que el Gobierno no retrocederá en la lucha contra la delincuencia. “Esta guerra no la vamos a perder. Las pequeñas batallas que estamos librando nos permitirán recuperar la paz y la seguridad para los ciudadanos”, sostuvo, destacando la necesidad de un trabajo articulado entre el Ejecutivo, la Policía y los gobiernos locales.
El operativo contó con la participación del ministro del Interior, del titular del Ambiente, del viceministro de Seguridad Pública y del comandante general de la Policía Nacional, quienes acompañaron al presidente durante el despliegue. Desde el estadio El Ermitaño, cientos de agentes fueron movilizados de manera simultánea hacia distintos puntos estratégicos del distrito.
La jornada forma parte de una estrategia nacional para reforzar la presencia del Estado en zonas afectadas por la delincuencia y enviar un mensaje de autoridad. Las autoridades reiteraron que estas acciones continuarán de forma sostenida, con el objetivo de devolver la tranquilidad a la ciudadanía y fortalecer la lucha contra el crimen organizado en todo el país.
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