Largas filas, tratos malos, escasez en medicamentos y la espera de hasta un mes por una cita médica, son algunos problemas que aquejan a los 13 millones de asegurados del seguro social de salud del Perú. Sin embargo, la salud pública no es la prioridad para el gobierno de turno ni del anterior porque en menos de dos años se colocaron como presidentes de Essalud a siete personas cuestionadas. Estas designaciones solo generan más inestabilidad y aleja de los peruanos la posibilidad de tener una atención de calidad.
Los constantes cambios iniciaron en el 2021, cuando Pedro Castillo gobernaba. En ese momento, Fiorella Molinelli Aristondo asumía el liderato de la institución, sin embargo ella renuncia en medio de investigaciones y después que la Fiscalía allanara su vivienda por presuntas compras irregulares de equipos médicos durante pandemia. (Ver línea de tiempo)
Es ahí donde el expresidente Castillo, realiza su primera designación y en agosto del 2021, nombra a Mario Carhuapoma Yance y sobre él pesaban varias denuncias por violencia u otros. Pasaron cinco meses y Carhuapoma renunció.
En su reemplazo entra Gino Dávila Herrera, otro involucrado en actos irregulares y dimite al cargo en marzo del 2022.
Castillo Terrones, en lugar de colocar a alguien idóneo, designa a Alegre Fonseca Espinoza, otro polémico personaje por su rosario de denuncias; en julio de 2022 es retirado y vuelven a nombrar a Gino Dávila. Según un reportaje de Punto Final, la carta de dimisión habría sido falsificada.
Dávila decide dar un paso al costado luego que el exmandatario Castillo sea abucheado en el aniversario del hospital Edgardo Rebagliati.
Tras ello, Aurelio Orellana, asume, pero las críticas inician porque él autorizó el desembolso de S/41 millones a favor de la empresa Aionia.
Asume la presidencia Dina Boluarte y sigue el mismo camino de Castillo, pues en menos de ocho meses ya hizo dos cambios. Sus designaciones también generaron críticas. La primera fue la exministra de Salud, Rosa Gutiérrez, quien denunció que la mandataria encubre la corrupción dentro de Essalud. Tomó su lugar César Linares.
Los constantes cambios generan que la salud pública no mejore y que la realidad de los asegurados no cambie, El decano de Colegio Médicos, Raúl Urquizo, indicó que jamás se había dado tantos cambios. “Genera una mala atención. La demanda de los asegurados es alta y tantos cambios generan una inestabilidad”, asegura.
Asimismo, sostuvo que la responsabilidad política, de los últimos nombramientos, la tiene el ministro de Trabajo, Fernando Varela, y pidió su renuncia. Otra de las críticas que hizo fue que ese puesto no debe designarse a dedo y debería respetarse la meritocracia.