Cerca de las 10:00 horas de ayer, la presidenta Dina Boluarte Zegarra, llegó a la avenida Brasil, encima de un Jeep negro desencapotado, en el cual inició su recorrido desde la avenida Javier Prado con dirección al estrado mayor para dar inicio a la Parada Militar 2023.
En su avance, al estilo de los expresidentes Ollanta Humala y Alberto Fujimori, se dio un baño de popularidad. Mientras que en la plaza Dos de Mayo se registraban enfrentamientos entre policías y manifestantes que pedían la renuncia de Boluarte.
El evento duró cerca de seis horas, donde congresistas y principales autoridades acompañaron a la presidenta. En un momento se puso un sombrero similar al que usaba su antecesor Pedro Castillo. Durante ello y hasta horas de la noche las protestas continuaban.
La jefa de Estado se retiró sin brindar declaraciones en la prensa y repartiendo besos al público. Mientras se desarrollaba la marcha patriótica, 15 congresistas demócratas enviaron una carta al secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en la cual expresaron su preocupación por la represión durante las protestas contra el gobierno de Dina Boluarte y crisis institucional en Perú. Los parlamentarios exigen que se respete el derecho a la libertad de expresión y protestas pacíficas para continuar con esta relación bilateral que permite acuerdos entre ambos países.
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