La Policía Nacional del Perú, en coordinación con la Policía de Ecuador, realizan operativos conjuntos desde el Puente Internacional de Aguas Verdes-Huaquillas, hasta el recorrido del Canal Internacional, en Papayal y Matapalo, para evitar el ingreso del prófugo delincuente venezolano, Héctor Guerrero, alias “niño Guerrero”, quien fugó del penal de Tocorón, en Venezuela.
El jefe del Frente Policial de Tumbes, general PNP Manuel Gonzales Novoa, precisó que tras la prórroga de la declaratoria del estado de emergencia en la provincia de Zarumilla, se han adoptado acciones de control para fortalecer los operativos en las zonas de frontera, en especial, los lugares que usan los migrantes para ingresar de forma ilegal al Perú.
El libre tránsito a través del Puente Internacional es solo para peruanos y ecuatorianos, es así que para personas de otras nacionalidades se realiza un exhaustivo control de documentos, lo que ha permitido intervenir a varios requisitoriados.
Héctor Gerrero, alias El Niño Guerrero, es buscado intensamente luego de haber fugado de un penal venezolano y los órganos de seguridad lo buscan por la participación del conocido delincuente en delitos agravados como homicidio, extorsión y terrorismo.
A los 200 efectivos policiales destinados a fortalecer la frontera, se han sumado unidades de Policía de Carreteras y de Seguridad del Estado, ellos están vigilando las trochas de Uña de Gato, Pocitos, La Palma, en coordinación con la policía ecuatoriana, quienes vienen proporcionando información de inteligencia.
El jefe del Frente Policial aseguró que los últimos días por el operativo binacional se ha logrado desarticular cuatro bandas delincuenciales que portaban armas de fuego y venían sembrando la inseguridad en Huaquillas-Ecuador y en Zarumilla, en el lado de Perú.
A través del Decreto Supremo N° 106-2023-PCM se decretó el estado de emergencia en la provincia de Zarumilla del departamento de Tumbes, lo cual faculta la intervención de la Policía Nacional, con el apoyo de las Fuerzas Armadas que regula el uso de la fuerza para articular servicios de detención, retención e intervención.
Fuente: Andina