El suboficial de tercera PNP, Sandro Villegas Corahua (23), quien fue cruelmente asesinado por narcoterroristas en el distrito de la Unión Asháninka (provincia de La Convención, Cusco) era un joven agente policial arequipeño de la provincia de Caravelí y este martes sus restos serán trasladados a Arequipa.
La familia está destrozada, sus compañeros de la Policía le rendirán un merecido homenaje por haberse enfrentado a los narcotraficantes.
Una nueva hipótesis tiene la Policía que un experimentado narcoterrorista conocido por su alias “Carlos”, sería quien ordenó la matanza, él es discípulo del jefe militar narcoterrorista Alejandro Borda Casafranca, el feroz camarada “Alipio”.