Con estupor veo por las redes sociales (por televisión no creo que lo pasen), leo en “X” (ex Twitter) y Facebook, cómo algunos candidatos empezaron su campaña electoral con insultos y descréditos contra sus rivales de otros partidos en vez de presentar un plan de gobierno, como debiera ser.
Los que más insultan son aquellos que tienen un acercamiento ideológico a acciones terroristas como el caso del abogado Raúl Noblecilla, (expulsado del colegio Markham de Lima por incendiar su salón y sobrino del nefasto canciller de Sendero Luminoso, Adolfo Olaechea) que es candidato a la segunda vicepresidencia en el partido Podemos y candidato a senador, quien el fin de semana que pasó en su discurso de presentación de la plancha presidencial lanzó duras críticas contra Rafael López Aliaga.
“Un mensaje a ese que le dicen puerco, a ese que prometió cambiar Lima…que gobierne su casa, porque este pueblo ya tiene un presidente”, dijo refiriéndose a José Luna, candidato presidencia de Podemos.
Bueno, también el exalcalde de Lima no se queda atrás, hace mucho tiempo denigra a sus rivales y periodistas, en entrevistas, conferencias de prensa o ceremonias de inauguración de sus obras.
Volviendo a los izquierdistas, la congresista Sigrid Bazán en Puno dijo, más o menos, que hay que luchar contra la derecha y si “hay muertos…también morirán policías”, justificando la violencia como parte de la campaña electoral.
Estos ejemplos nos muestran que faltando siete meses para las elecciones, esta campaña será así: llena de insultos, de ataques y hasta fabricarán denuncias, como la que hizo la periodista colombiana Clara Elvira Ospina contra Keiko, en las antepasadas elecciones, indicando que la DEA la estaba investigando.
Tenemos una población que necesita saber el plan de gobierno de cada partido. NO se necesita que le mientan. Necesitan que digan qué van a hacer cuando sean gobierno. No quieremos recetas mágicas, como aquella que “los pobres dejarán de ser pobres”. Se quiere programas realistas y que se puedan cumplir, sin recurrir al asistencialismo o al discurso demagógico, mentiroso como aquel “no habrá más pobres en un país rico”. Al final Pedro Castillo a los únicos que sacó de la pobreza fue a su familia, mediante presuntas coimas que son investigadas por la fiscalía.
FALTA DEMOCRACIA INTERNA.Por otro lado, el domingo pasado se cumplieron elecciones internas, en algunos de los 34 partidos inscritos, pero para sorpresa fue un saludo a la bandera para varias agrupaciones como Fuerza Popular (Keiko Fujimori), Renovación Popular (Rafael López), Podemos (José Luna), Venceremos (Ronald Atencio), País para Todos (Carlos Álvarez), Sí Creo (Carlos Espá), El Perú Primero (Mario Vizcarra), porque no hubo elecciones internas; los candidatos fueron nominados a dedo.
El APRA realizó elecciones internas y sus militantes eligieron al abogado Enrique Valderrama, como su candidato presidencial, entre 10 listas que se presentaron. En Acción Popular se eligieron delegados nacionales encargados de definir las candidaturas el próximo 7 de diciembre. Los dos partidos más antiguos en el Perú dieron lección de democracia.
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