La muerte del director del portal Kamila Noticias Fernando Núñez Guevara, estremeció la provincia de Pacasmayo y encendió nuevamente las alarmas sobre la violencia que enfrentan los comunicadores en el país. El reportero fue asesinado la tarde del sábado cuando retornaba de una cobertura, en un tramo concurrido de la Panamericana Sur, donde fue interceptado por sicarios armados.
De acuerdo con el reporte policial preliminar, Núñez viajaba en motocicleta junto a su hermano cuando dos sujetos los alcanzaron y dispararon al menos tres veces antes de huir a toda velocidad. Testigos coinciden en que la ejecución fue “directa y rápida”. El periodista falleció en el lugar, mientras que su hermano continúa en estado crítico en el Hospital Tomás Lafora, bajo atención especializada.
El crimen generó una inmediata reacción de rechazo por parte de organizaciones gremiales y defensores de la libertad de prensa. La Federación de Periodistas de La Libertad calificó el hecho como “una amenaza severa” y exigió acciones urgentes para detener la escalada de ataques contra quienes ejercen el periodismo. La Asociación Nacional de Periodistas (ANP) también se pronunció, remarcando que se requiere “una investigación diligente que permita determinar el móvil y capturar a los autores materiales e intelectuales”.
La trayectoria de Núñez, ampliamente reconocido por difundir denuncias ciudadanas y reportar problemáticas locales, amplificó el impacto del crimen en la comunidad. Colegas, vecinos y autoridades municipales destacaron su compromiso profesional y lamentaron que, a pocas semanas de haber perdido a su padre, la familia Núñez enfrente ahora una tragedia aún mayor. El municipio de Pacasmayo expresó su “profundo pesar” y transmitió condolencias al equipo del medio digital.
Las autoridades de La Libertad mantienen una investigación abierta para esclarecer el ataque, aunque hasta el momento no se ha identificado el móvil ni logrado detenciones. Organizaciones civiles y gremiales exigen celeridad, protección para el ejercicio periodístico y garantías para evitar que hechos como este se repitan. La comunidad local, golpeada por la violencia, reclama justicia para un periodista que dedicó su labor a informar y servir a su región.
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