Estamos a punto de terminar este año con aspectos positivos como es el crecimiento en la economía, la baja inflación, el fortalecimiento de nuestra moneda como una de las más fuertes en toda la región, así mismo se va recuperando la inversión privada, las exportaciones son mejores gracias a la puesta en marcha del mega puerto de Chancay así como también el aeropuerto internacional Jorge Chávez, hay una mejora en la minería, la suba del oro, la plata y del cobre nos favorecen por ser un país con minería, entre otros.
Pero no todo es bueno, no podemos vencer la corrupción especialmente aquella que viene del estado por nuestra clase política que lo único que hace es aprovechar de este crecimiento para sus propios beneficios, logrando enriquecer solo a unos cuantos y no repartiendo equitativamente el crecimiento de la economía, especialmente en los hogares que presentan pobreza y extrema pobreza, tenemos un estado injusto que durante décadas no trabaja para mejorar el sistema de salud, la educación no presenta avances significativos, no hay un crecimiento equitativo en todas las regiones y la falta de oportunidad de empleos hacen que sigamos siendo un país envuelto en la pobreza.
Los políticos dejan mucho que desear este año, especialmente los congresistas, que no legislaron en favor de la sociedad, por el contrario, favorecieron a ciertos sectores incluyendo a los delincuentes, sin importarles la sociedad o las generaciones que vienen, su único objetivo es la toma del poder y continuar enriqueciéndose, sentenciando a nuestro país a la ignorancia, la miseria y la poca oportunidad.
No somos un país con una educación de calidad, los niños y jóvenes siguen relegados con una educación tradicional, que no tiene objetivos claros que busquen el desarrollo de competencias y el avance en los niveles de competitividad, no hay un impulso a la agro industria, muchas veces nuestros productos son exportados desde otros países e incluso no tenemos buenas carreteras para poder sacar los productos de diferentes lugares, la violencia se incremento y no existen leyes que puedan frenar ello solo discursos falaces especialmente del presidente de la republica que es un títere del Congreso.
Estamos a puertas de una nueva elección y las promesas hay para todos los gustos y los políticos son los mismos que pretenden quedarse en el estado, estamos con piloto automático, necesitamos un verdadero cambio y este solo se dará si nuestro voto es responsable, debemos entender que aquellos que tuvieron la oportunidad y no hicieron nada por nuestro país no deben volver, de lo contario cada año seguirá siendo lo mismo y si deja de funcionar ese piloto automático probablemente vayamos a un abismo sin fin.
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