Hoy la humanidad vive momentos difíciles con el cambio climático, el fenómeno el Niño global y las amenazas de pandemias, se suma a ello una gran crisis económica debido a la baja producción, especialmente en el sector agrícola, la falta de empleo y la aparición de nuevas tecnologías que desplazan a los hombres y los reducen sus posibilidades laborales.
Pareciera que en nuestro país vivimos otra realidad, ya que los líderes solo se dedican a seguir trabajando por sus intereses personales, continuamos sumergidos en la corrupción, no hay políticas preventivas y no se mira a futuro, la violencia es cada vez mayor, los niveles de pobreza avanzan día a día, nuestro sistema de salud es pésimo y no hay reformas educativas para garantizar un verdadero cambio, la justicia sigue siendo lenta e inoperante y los poderes del Estado no tienen legitimidad, el sistema universitario volvió a lo anterior, se dejó de lado la calidad educativa y solo responde a intereses empresariales de algunos políticos.
Nuestra sociedad parece adormecida y ahogada por los problemas, no hay fuerza para generar un verdadero cambio, y pareciera que estamos sentenciados a seguir eligiendo entre los mismos actores que nos están llevando a la desgracia, haciendo de nuestro país una repartija con máscaras de derecha e izquierda que al final son lo mismo, porque no luchan por los intereses de nuestros ciudadanos.
Ningún cambio se dará si no lo hacemos por nosotros mismos, debemos tener nuevas actitudes, prepararnos para el futuro y generar nuevos líderes, impulsemos primero el cambio en la educación tanto básica regular como universitaria, no nos dejemos engañar más, aprendamos a tomar decisiones correctas y apliquemos la verdadera justicia de dar a cada quien lo que le corresponde, los cambios se dan con inteligencia, generemos oportunidades a personas nuevas con capacidad moral y visión de transformación, que tenga una mirada humana y luchen especialmente por los que menos tienen, debemos entender que nosotros somos agentes de cambio, por ello desarrollemos el pensamiento crítico, tenemos todavía espacios para reflexionar, indagar y buscar soluciones a los grandes problemas que tenemos, en nuestras manos está la decisión final.