El Ministerio Público y el Poder Judicial están completamente politizados, vemos como vergonzosamente se destituyen a fiscales, jueces y luego son restituidos ya sea por la junta nacional de justicia o el tribunal constitucional, pese a que están en investigación y en algunos casos existes pruebas de mal accionar que va en contra de la justicia.
Parece que esto se convirtió en un juego y lucha del poder, porque detrás de ello están los amos y caudillos de los partidos políticos que a pesar del no apoyo de los ciudadanos pretender entrar al gobierno para continuar la destrucción del país, hoy encontramos una justicia débil, inoperante y en estado de agonía, el Poder Legislativo poco a poco esta copando todo el poder con congresistas que probablemente no tengan ni idea del gran daño que causan al país, los últimos días hemos visto como pretenden restituir la inmunidad para escapar de la justicia, también se observa que aquellos que fueron acusados por ser parte de los cuellos blancos están en las calles y volviendo a ocupar cargos públicos, otros que favorecieron a sus familias hoy pretender ser autoridades del país, pareciera que nos hace mucha falta dentro de la formación profesional cursos de ética que orienten al buen actuar de las autoridades, estamos normalizando la corrupción, no hay conciencia y menos capacidad para operar una justicia objetiva que de a cada quien lo que le corresponde.
A puertas de las elecciones es necesario antes de ello hacer una reforma del poder judicial y el ministerio público, que este no sea por parte del congreso porque de seguro ellos estarán más preocupados por legislar por el día de la piedra o el camote o buscaran acomodar la reforma a sus intereses, aquí deben actuar las universidades aquellas que no tienen por dueño a los políticos y los colegios profesionales que deben velar por el buen actuar de sus agremiados, no podemos elegir entre un grupo que políticos que demostró no tener vergüenza de sus actos, tenemos que fortalecer la justicia con gente que posea sabiduría y coraje para tomar decisiones y aplicar la justicia sin ningún tipo de distinción, las universidades deben revisar sus planes curriculares y evaluar a sus docentes, estos deben ser personas con una integridad profesional y moral muy alta.
De nada sirve cambios de gobierno si solo son mascaras porque en el fondo son los mismos los que gobiernan, si logramos fortalecer la justicia muchos de ellos, porque no decir la mayoría estarían en las cárceles o simplemente por cualquier acto en contra de la sociedad no les permitirá postular, la justicia es clave para un cambio verdadero, pero no se puede hacer al antojo político, este se debe dar con mucha responsabilidad, no operando ninguno de los que se dicen ser especialistas porque nunca hicieron nada cuando estuvieron dentro del poder judicial, hay gente con capacidad moral, una convocatoria nacional nos daría buenos resultados y buenos jueces y fiscales, un verdadero cambio no pasa por elección tras elección sino por un país con verdadera justicia para que los ciudadanos no sean engaños con los mismos de siempre.