A poco más de un mes para el inicio del año escolar 2025, miles de padres de familia enfrentan un drama que año tras año parece no encontrar solución: las dificultades para matricular a sus hijos en instituciones educativas. Denuncias por cobros indebidos, falta de vacantes y la necesidad de una infraestructura adecuada se suman a la lista de problemas que aquejan a las familias peruanas.
Uno de los problemas más recurrentes es el de los cobros indebidos por parte de algunas instituciones educativas. Padres de familia han denunciado que, además de las cuotas establecidas, se les exige pagar “donaciones” o “cuotas extraordinarias” para asegurar una vacante. Esta práctica, que se ha vuelto común en varias regiones del país, pone en una situación de vulnerabilidad a quienes no pueden permitirse estos pagos adicionales. En Diario Viral ya mostramos algunos casos presentados en distritos.
A esta situación se suma la falta de vacantes en las escuelas públicas y privadas. Año tras año, padres de familia forman filas para acceder a un espacio para su hijo en el plantel de su preferencia. Debemos agregar que muchas instituciones educativas carecen de las condiciones básicas para ofrecer una educación de calidad. Salones abarrotados, falta de servicios higiénicos y deficiencias en la seguridad son solo algunos de los problemas que se presentan.
Ante este panorama, la fiscalización de las instituciones educativas se torna imprescindible y resulta en una obligación muy urgente. Es necesario que las autoridades competentes tomen cartas en el asunto y realicen inspecciones exhaustivas para garantizar el cumplimiento de las normativas y evitar abusos.