El lunes 11 de noviembre Arequipa está de fiesta, y es que la Universidad Nacional de San Agustín cumple 196 años de creación institucional. No es exagerado decir que toda Arequipa está de fiesta, ya que la Unsa es la universidad más importante de la región y del sur del país. No estamos hablando de cualquier universidad de garaje, ni una universidad negocio ni mucho menos una universidad-convento. Como una de las instituciones educativas más antiguas de Perú, la Unsa viene priorizando varios aspectos clave para mantenerse relevante y continuar su legado de excelencia académica y compromiso social.
La calidad educativa y la actualización curricular son esenciales. La Unsa viene actualizando los planes de estudios de sus programas académicos para alinearse con los avances científicos y tecnológicos. Esto incluye la integración de habilidades digitales y competencias transversales en los planes de estudio, asegurando que los graduados estén preparados para los desafíos del mundo moderno. La investigación y la innovación también son fundamentales. La Unsa viene fomentando la investigación de alto impacto y la innovación tecnológica, estableciendo alianzas con el sector privado.
Esto permite desarrollar proyectos interdisciplinarios que contribuyen al avance del conocimiento y al desarrollo sostenible. Otro aspecto crucial es la tecnología y digitalización. Utilizar plataformas digitales y herramientas de aprendizaje en línea permitirá ofrecer programas flexibles y accesibles, adaptándose a las necesidades de los estudiantes del siglo XXI. La inclusión y equidad son pilares que no deben ser olvidados. Asegurar que todos los estudiantes, independientemente de su origen socioeconómico, género, capacidades diferentes, origen étnico, etc., tengan acceso a una educación de calidad es una prioridad. Implementar políticas de inclusión y programas de apoyo financiero, como becas y subsidios, contribuye a una mayor equidad en la educación superior. La vinculación con la comunidad es otro aspecto importante. La Unsa viene fortaleciendo los lazos con la comunidad local y regional a través de proyectos de desarrollo social y económico que promueven el bienestar comunitario.
Estando cerca de cumplir 200 años de creación, el bicentenario está a la vuelta de la esquina. Para llegar bien al 2028 es necesario garantizar la sostenibilidad de todo lo bueno de todas las gestiones rectorales, corregir los no pocos errores que también se han cometido en todos estos años, y mejorar para adaptarnos a un mundo en constante cambio. Ese es el reto que tanto estudiantes, docentes, personal administrativo y de servicios y egresados tenemos que asumir. ¿Estamos preparados?