Estas dos palabras resumen, en parte, el contenido que deberá tener el mensaje a la nación que la presidenta Dina Boluarte, en algunas horas, dirigirá al país. En medio de una inestabilidad política de la cual todavía no podemos liberarnos, resulta más que necesario buscar una luz de esperanza para que el Perú salga adelante transcurridos 202 años de vida independiente.
Será oficialmente el primer mensaje a la nación que dirigirá Dina Boluarte al país. Tras poco más de siete meses con las riendas del Perú en sus manos, seguramente hará un balance de lo sucedido hasta la fecha. Lamentablemente el comienzo no fue auspiciosos, pues las protestas fueron recurrentes entre diciembre del 2022 y enero del 2023 y se saldaron de manera triste con la pérdida de más de sesenta vidas de peruanos durante las manifestaciones.
La mandataria tendrá que hilar fino al momento de referirse a estos hechos lamentables. Si no los menciona, tendrá un punto en contra, pues sus adversarios utilizarán este hecho para retratarla como una mujer sin la humanidad suficiente para valorar la vida de cada uno de los ciudadanos.
De igual forma, se tiene un tema pendiente sobre el adelanto de elecciones. Existen sectores que piden su renuncia. Ante esta situación, la mandataria debería marcar una posición firme frente al tema. La premisa es recuperar la estabilidad y ello no se solucionará con un nuevo cambio de timón. Sin embargo, cualquier decisión sobre el tema solo le competerá a la presidenta Boluarte.
Además, se necesita posiciones firmes ante la corrupción y el abandono que tiene el Estado hacia diversos sectores. El mensaje presidencial será una buena oportunidad para que el Gobierno asuma una posición con respecto a la realidad nacional que hasta el momento sigue golpeando a todos con más problemas que soluciones.
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