El Ministerio de Salud ya anunció el ingreso de la subvariante covid-19 denominada JN.1, también conocida como Pirola. Se trata de un linaje derivado de la variante Ómicron que ya tuvo impacto en el país como todas las demás que derivaron del nuevo coronavirus. Este hecho se vio reflejado además en un incremento de la demanda por pruebas de descarte de la enfermedad en los centros de salud, sobre todo en la capital de la república.
Vale reiterar lo dicho por diversos especialistas desde la etapa más dura de la pandemia. Ellos indicaron que la covid-19 llegó para quedarse. Aunque conforme pasó el tiempo, la enfermedad fue mutando con diferentes características al ingresar al organismo, lo cierto es que seguían presentándose casos positivos.
Sin embargo, hay hechos que se mantienen vigentes. Por ejemplo, los especialistas del sector salud resaltaron que el nivel de contagio de las variantes covid-19 sigue siendo alto. También han resaltado que los grupos extremos en edad (adultos mayores y menores de 5 años) siguen siendo vulnerables ante los síntomas más fuertes del nuevo coronavirus.
En esa línea también debemos resaltar que nadie está libre de ser contagiado de la covid-19. Incluso desde el Gobierno hemos tenido casos como el del ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, quien fue diagnosticado con la enfermedad y ahora se recupera en su domicilio.
Bajo este panorama no dejemos de resaltar la importancia de la vacunación para prevenir los síntomas más graves de la enfermedad. Sin embargo, más importante será la labor preventiva para evitar el contagio. Así no tendremos largas filas en los vacunatorios cada vez que llegue una nueva variante. Está en nosotros cuidarnos y cuidar a nuestros seres queridos ante la covid-19 y demás enfermedades en nuestra sociedad.
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