La olla común Virgen de la Candelaria fue fundada el 17 de abril del año 2020 en plena pandemia del nuevo coronavirus. Las mujeres luchadoras, a lo largo de estos últimos tres años, nunca se amilanaron ante las adversidades que tuvieron que enfrentar con el único objetivo de alimentar a las personas vulnerables de su asociación de vivienda que lleva el mismo nombre.
Este año tuvieron la suerte de ser consideradas por el Programa Nacional de Alimentación Escolar Qali Warma, del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) para recibir alimentos de acuerdo al Decreto de Urgencia 002-2023, que faculta al programa en mención la tarea excepcional de brindar apoyo alimentario a los gobiernos locales que cuenten con ollas comunes registradas y reconocidas por su gobierno local.
Sin embargo, la comuna cerreña retrasa la entrega de las dotaciones mensuales y con ello se complica la elaboración de los almuerzos, ya que por ejemplo este mes solo tienen en su almacén algunos insumos como frejoles, avena, lentejas y atún.
“No nos llegan los alimentos y solo nos queda cocinar con lo que tenemos. Nos gustaría que la municipalidad nos entregue los insumos a tiempo para que nosotras también podamos cocinar la comida como debe ser, sino tenemos que estar tratando de acomodar las cosas que tenemos”, dijo la almacenera Elizabeth Paz.
Pero esta no es la única olla común que tiene este problema, ya que en la zona de la autopista Arequipa-La Joya hay siete de estas organizaciones sociales que brindan su servicio de manera ininterrumpida desde la pandemia.
La coordinadora de las ollas comunes de este sector, Diana Mozombite, dijo que si bien es cierto siempre tienen algunos productos en sus almacenes es porque ellas tratan de estar precavidas ante cualquier escasez, pero necesitan que las entregas mensuales sean puntuales.
“Cuando ya no tenemos insumos, nos presionan en terminar nuestras raciones y demoran en entregarnos y en ese lapso nos quedamos desabastecidas. Pido a la municipalidad que no nos presionen en terminar, que nos dejen guardar pan para mayo porque cuando nos quitan y luego nos vuelven a dar nos ahorcan en ese momento”, comentó.
Recordó que ellas, como mujeres y amas de casa, saben manejar la economía y usan su imaginación para ver que no falten los almuerzos, pero requieren tener los insumos que Qali Warma ha dejado para que los alimentos sean más nutritivos.
COMPROMISO. La olla común Virgen de la Candelaria diariamente entrega 55 raciones y para comprar verduras y otros ingredientes cada comensal colabora con S/2 soles por plato.
Hubo una temporada que cocinaban con leña, pero al no contar con el dinero suficiente se vieron en la obligación de volver a usar el gas que dura poco tiempo, pero es más accesible.
La presidenta de la olla común, Claudia Huayhua Huamaní, indicó que con el transcurrir del tiempo se ha ido reduciendo el apoyo de empresas, ONG y personas particulares, ahora solo cuentan con el apoyo que brinda Qali Warma.
Ellas son muy organizadas, así cada día dos vecinas son las encargadas de cocinar el almuerzo, para ello previamente piensan en el plato que van a elaborar de acuerdo a los alimentos que tienen. Muy temprano se encuentran en el local y para el mediodía está listo todo para comenzar a repartir a los comensales.
“Nosotros recibimos los alimentos de Qali Warma que los tiene el municipio de Cerro Colorado una vez al mes, pero ahorita ya hemos alargado la fecha con lo poco que tenemos. Nos entregaron en junio y nos indicaron que para fines de agosto nos darían otra vez, pero no lo han hecho”, comentó.
AYUDA. Con un pequeño local de bloquetas y techo de calamina, en medio de la tierra, las socias de la olla común Virgen de la Candelaria no pierden la esperanza de seguir apoyando a sus vecinos que no tienen recursos económicos, aquellos que son adultos mayores y su cuerpo ya nos les permite trabajar, las mujeres que deben sacar adelante a sus hijos solas, a las personas con discapacidad y demás casos sociales que las autoridades tienen en el olvido, pero que ellas los tienen presenten y son su estímulo para seguir luchando para elaborar los almuerzos.
La presidenta de esta organización, Claudia Huayhua, hizo el llamado para que puedan colaborar con ellas haciendo llegar cualquier ayuda comunicándose al celular 984 003 405.