Escribe: Noelia Zelada Yauri
Existe una tolerancia en oprimir a las mujeres como amas de casa, señala la presidenta del Foro Regional Por Los Derechos Sexuales y Reproductivos de Arequipa, Mercedes Neves Murillo, quien argumenta que la labor doméstica debería tener un reconocimiento social y económico. Agrega que mientras Las mujeres no sean económicamente independientes son más propensas a vivir en un círculo de violencia en sus hogares.
“Lamentablemente existe tolerancia social frente a ese anonimato de las mujeres. Lo peor es que el trabajo doméstico es igual a violencia, sino no habrían estadísticas tan preocupantes”, explicó. (Ver infografía)
PROYECTOS DE VIDA OLVIDADOS. Según el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán y el Instituto de Estudios Peruanos (IEP, 2022), el 52 % de peruanos considera que la población femenina debe cumplir primero su rol de madre, esposa o ama de casa y después realizar sus sueños. Según el mismo estudio, el 82 % de hogares peruanos hay una mujer que realiza labores domésticas y vela por el cuidado de su familia.
En ese sentido, las mujeres dejan de lado sus proyectos de vida para dedicarse exclusivamente a las labores del hogar, gracias a esta actividad no remunerada sus hijos pueden estudiar, sus esposos pueden trabajar y la economía funciona en un país. Esta situación en la que todos salen ganando, pero a costa de oprimir a una mujer va a perdurar en el tiempo siempre y cuando siga habiendo una tolerancia social, indica Neves.
¿QUE PUEDEN HACER LAS AMAS DE CASA? “Ellas tendrían que romper con el servicio asistencialista y responder a la normativa nacional”, expresó. Añade que el Estado debe garantizarles acceso a la salud y educación.
La especialista lamenta que la sociedad no reconozca la labor de las amas de casa como un trabajo. “Hay mujeres a quienes les pregunto sobre sus trabajos y me responden apenadas, yo no trabajo soy ama de casa, y no se dan cuenta que eso también es un trabajo”, indicó.
Añade que las mujeres que crecen en hogares con esa forma de pensar perpetúan la tolerancia a la violencia. Lamenta que este tema no sea prioritario en la agenda de las autoridades.
HACEN CAMPAÑA. Roberta Marmanillo, representante de la Asociación Humanidad Libre, señala que la aplicación completa de la “Ley para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres y los integrantes del grupo familiar” (Ley n.º 30364) aún no se ha logrado. Por ello, es partícipe de la campaña ¿Nos Toca? para llamar la atención del Gobierno Regional de Arequipa y del central.
“Queremos que el Gobierno cumpla las políticas que ya existen. Al mismo tiempo, que la sociedad asuma su responsabilidad. Sería de gran ayuda para las mujeres si sus parejas compartieran la carga familiar a partes iguales”, explica.