El congresista Alex Paredes Gonzales intentó ser secretario del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación (Sutep) en los años 90; sin embargo, no lo logró. Por el contrario, desde esa fecha empezó su rechazo al citado grupo, según el secretario regional de la organización, Hamer Villena. Desde esa vez y ahora como legislador cierra las puertas al sindicato.
“El señor Paredes nos odia a muerte porque, según la universidad Católica, se nombró con un diploma de egresado falso y según la casa de estudios, ese documento era de uso interno y no debió usarse el certificado fuera de la universidad. Con eso se logró nombrar”, refirió el dirigente.
Antes de ser parlamentario, Paredes llegó a su curul con 18 673 votos, según la plataforma del Jurado Nacional de Elecciones (JNE). Antes no postuló a ningún cargo público, pero era activo como dirigente en el Sutep. Aspiraba a más, pero no lo consiguió.
Villena describe que conoció a Paredes como alguien mentiroso y ahora que es parlamentaria reafirma su calificación, ya que aún sigue difamando al sindicato.
Lo más grave que cuenta Villena, es que el ‘padre de la patria’, cierra la puerta a los dirigentes del Sutep, no recibe ni apoya a nadie. Recalca que el trabajo de un legislador es recibir y representar a todos, pero Paredes no cumple con ello.
Cuando Alex Paredes entró al Congreso, junto con el expresidente Pedro Castillo, lo defendía a capa y espada. En el 2022 afirmaba que no consentirían ni un ápice de maltrato contra el mandatario. Ahora que Dina Boluarte es la jefa de Estado, cambió de equipo y también saca cara por ella.
Una de sus últimas acciones a favor de Boluarte, fue cuando presentó una reconsideración para que sus colegas voten nuevamente el permiso para que viaje a Estados Unidos, en plena emergencia por los incendios forestales.
Sobre su trabajo en el último periodo, Alex Paredes detalla en su informe que presentó 33 proyectos de ley, de ellos cinco fueron aprobados.
Además es promotor de una norma cuestionada que aprueba el nombramiento automático de docentes con más de tres años en situación de contratados en el sector público. Esto fue rechazo por el Ministerio de Educación, ya que atenta contra la calidad y los principales afectados serán los estudiantes. Pese a ello, Paredes defendió la iniciativa.
Ahora es presidente de la Comisión de Ética, grupo de trabajo que se encarga de sancionar a los malos parlamentarios. Antes de él, su antecesor Diego Bazán, obligó a todos a que vayan presencialmente porque solo sesionaban una vez a la semana. Sin embargo con Paredes se retornó a la virtualidad y al inicio de las sesiones solo se ven a uno o máximo cuatro parlamentarios.
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