Nuevamente el puente Añashuayco, uno de los principales puntos de ingreso y salida de Arequipa, fue escenario de roces entre manifestantes y policías.
Los agentes tuvieron que utilizar bombas lacrimógenas para disuadir a los protestantes que bloqueaban la vía.
Los pobladores, quienes descendieron con escudos hechos de metal, se resistieron a salir. Los militares tuvieron que ayudar a la Policía a levantar las mallas y evitar que la vía permanezca bloqueada.
Como un momento fuera de la escena, un agente ayudó a una humilde vendedora a recogerlas gelatinas que se le cayeron al momento de los incidentes. Las protestas continuarán este jueves.