En el Perú, según el estudio de Demografía Empresarial del Instituto Nacional de Estadística e informática (INEI) se tiene que el 57.90 % de las empresas dadas de alta en el último trimestre del 2023 fueron lideradas por personas del género femenino. Pese a esta realidad, los prejuicios de género y las barreras culturales, sumados a cómo conciliar la vida laboral con la familiar, representan límites en el crecimiento profesional de las mujeres y esto impacta en su participación en el sistema financiero.
“Uno de los desafíos para las emprendedoras son las limitaciones para acceder a créditos y financiamiento en comparación a los varones que, en algunos casos, se debe a la percepción equivocada sobre la mujer como factor de mayor riesgo en cuanto a créditos”, advierte la jefa de Productos de Caja Piura, Liliana Lescano.
Durante el año pasado, más de 15 mil mujeres de diversas condiciones económicas en todo el país obtuvieron créditos a través de la campaña “Crece Mujer”, que contribuyó con sus emprendimientos y empoderándolas en nuestra sociedad, declaró la especialista.
Un aspecto revelador es que el 46.49 % de emprendedoras que solicitaron este crédito son Millenials, es decir, mujeres adultas que se animan a impulsar sus propios emprendimientos.