María Luisa Doig maneja el florete y la espada cual experta. Los 26 años inmersas en el deporte de la esgrima han curtido sus conocimientos y han hecho aflorar sus ganas de comenzar a saldar deudas pendientes como la de cosechar una medalla en los Juegos Panamericanos Santiago 2023 a donde ira con las ansias de cobrarse la revancha.
Pero María Luisa no irá sola y es que, a comparaciones de otras ediciones, en el que ella cargaba con toda la presión de brindar títulos al Perú en los certámenes magnos, estará acompaña con cinco exponentes más con quienes unirá fuerzas para ascender a lo más alto del podio en Santiago 2023.
“Estoy muy emocionada porque será la primera vez que la esgrima peruana irá con tantos representantes a unos Juegos Panamericanos. Yo he ido sola a varias ediciones, pero ahora hay seis cupos. Están Eduardo García (espada), Fabián Huapaya (sable), el equipo de florete femenino conformado por Kusi Rosales, Mariana Soriano y Paola Gil, y mi persona en la modalidad de espada”, expresó.
Un punto más que pone feliz a la deportista de 32 años es que el país tendrá un exponente varón en las competencias de sable, situación que no ocurría desde hace muchos años atrás y que demuestra los avances vertiginosos de la esgrima peruana en esta parte del continente.
“El último en lograr un cupo fue Huapaya y fue muy importante, porque hace mucho tiempo el Perú no figuraba en sable masculino a nivel internacional. Eso dice que la esgrima en nuestro país está creciendo”, asegura la medallista de oro en los Juegos Odesur 2022.
Sin duda, María Luis Doig será la voz cantante en el grupo de esgrimistas panamericanos porque su vasta experiencia le permite guiar a los más jóvenes que por primera vez experimentarán una participación en un torneo de gran magnitud.
“Siempre les digo a los chicos que, si yo puedo hacer algo, ellos también pueden lograr hasta mayores cosas. Llevo 26 años en la esgrima y veo que mi experiencia aporta mucho, porque me ayuda a tomar decisiones asertivas en los combates. Me siento más madura a la hora de realizar los toques, me divierto más y disfruto al máximo”, manifestó.
Va por el todo
Para exponente nacional el tiempo es oro y es que no quiere dejar ningún detalle en sus entrenamientos en su intención de llegar en óptimas condiciones a los Panamericanos cuando faltan apenas un poco más de un mes para que rompan fuegos en la capital chilena. Allí buscará su revancha tras escapársele de las manos la medalla en los Juegos Lima 2019.
Mientras tanto alista maletas para enrumbar a Europa donde desarrollará la última etapa de su preparación con miras al torneo ecuménico.
“En una semana viajo a Hungría para mi preparación, gracias al apoyo del Programa Rumbo a Santiago del IPD. Antes de Santiago tengo dos competencias, la Copa Satélite en Serbia, el 24 del presente mes; tres días después competiré en el Sudamericano de Mayores en Brasil”, contó.
Agregó: “En casa me quedé a dos puntos del podio en unos Juegos Panamericanos, pero ahora siento que lo puedo hacer en Chile. Estuve en Río 2007, Toronto 2015 y Lima 2019, y me siento preparada”, culminó Doy, quien también anhela ser parte de una ceremonia de inauguración de unos Juego.
María Luis Doig pertenece al Programa de Apoyo al Deportista (PAD) y al Programa Rumbo a Santiago 2023 del Instituto Peruano del Deporte (IPD).
La deportista comparte sus estrictos entrenamientos de la esgrima con su profesión de odontóloga.
A los dieciséis años, Doig hizo su debut oficial en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, donde compitió en el evento de florete individual femenino. También estuvo en Tokio 2020.
Fuente: Andina
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