A sus 35 años, Karim Benzema respondió a las dudas sobre su estado de forma en el Real Madrid, marcando dos tripletes en cuatro días, uno de ellos en casa de su eterno rival Barcelona, el miércoles (4-0).
A la edad en la que la mayoría de los jugadores piensan mas en lo que les espera tras su retirada, él está en la cima de su arte y puede soñar, como en 2022, con una nueva primavera galáctica.
En el Camp Nou, el Balón de Oro se convirtió en el primer jugador de la rica historia madrileña en inscribir al menos 20 goles en once temporadas.
"El trabajo que ha realizado durante la tregua internacional le ha ayudado mucho", asegura su entrenador Carlo Ancelotti. "Se encuentra en una condición física óptima, y con las cualidades que tiene, marca diferencias. Sigue siendo uno de los mejores jugadores del mundo. No solo uno de los mejores atacantes. Es uno de los mejores jugadores del mundo en este momento".
Un pico de forma que llega en el momento del regreso de los partidos a todo o nada, y que también deja atrás varios problemas físicos.
Cuando su contrato termina el 30 de junio próximo, el francés ya ha negociado su prolongación de un año en el Real Madrid. Según la prensa española, su temporada 2023-2024 podría ser su última en el Real Madrid, que ya tiene comprometido al prodigio brasileño Endrick y sigue buscando seducir a Erling Haaland, tras el culebrón Kylian Mbappé.
Tres días después de su triplete contra Valladolid (6-0) en LaLiga, y tres semanas después de su gol contra el Liverpool, para meter al Real Madrid en cuartos de final de Liga de Campeones contra el Chelsea, Benzema muestra que hay que seguir confiando en él.
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