La tensión creció en la antesala de las semifinales de la Liga 2. A pocas horas del partido entre Deportivo Moquegua y Unión Comercio, el cuadro sureño denunció públicamente que algunos de sus jugadores fueron víctimas de extorsión mediante mensajes intimidatorios. El hecho ha generado alarma en el club y puso en alerta a las autoridades deportivas.
“El club Deportivo Moquegua informa a la opinión pública (…) que hemos recibido mensajes que buscan alterar la tranquilidad de nuestro plantel y cuerpo técnico”, comunicó la institución. El club señaló que estos mensajes tendrían como fin influir en el desempeño deportivo del equipo y atentar contra los valores del juego limpio.
El arquero Renzo Figueroa compartió una captura del mensaje recibido vía WhatsApp, donde un usuario identificado como “~betson” lo amenazó directamente. En el texto, le advertían que la seguridad de su familia dependía de “asegurar el dinero apostado” en el encuentro y que incluso debía “hacerse expulsar o lesionar” para cumplir con el pedido.
Ante la gravedad de las amenazas, Figueroa pidió la intervención inmediata de la Federación Peruana de Fútbol y la Agremiación de Futbolistas. “El fútbol debe ser pasión, respeto y unión, no miedo ni violencia”, manifestó el guardameta.
Deportivo Moquegua anunció que colaborará con las autoridades para esclarecer los hechos y reforzar la seguridad del plantel. “Solicitamos a nuestra hinchada mantener la calma y seguir alentando con respeto y pasión”, concluyó el club en su comunicado.