El entrenador Jorge Fossati mantiene en suspenso su permanencia en Universitario pese al título conseguido, al plantear exigencias claras para seguir en el cargo en el 2026. Según medios deportivos, Fossati aún no se ha reunido con la dirigencia cremas para cerrar su futuro, aunque ya anunció que solo continuará si el proyecto deportivo cumple con sus condiciones.
“Si esta temporada fue buena, el 2026 debe ser mejor. Para ello, las autoridades del club deben trazar un plan para que haya sintonía. Han ocurrido cosas que quiero tener claras para decidir si continúo. Si llega un jugador es porque yo dije que sí; de lo contrario, me voy”, indicó Fossati.
El técnico uruguayo puso sobre la mesa su demanda de tener la “potestad final” para aprobar fichajes, renovaciones y salidas en el plantel de Universitario, lo que choca con la estructura actual en la que Álvaro Barco actúa como director deportivo y ejerce ese rol de filtro. Además, la directiva reconoció que la reunión clave aún no se ha realizado y que “esta semana” será decisiva para aclarar la situación.
Fossati llegó al club, logró el tricampeonato de la Liga 1 (2023-2025) y firmó contrato hasta diciembre de 2026, pero su continuidad no está asegurada. La distancia entre sus expectativas y la administración cremas se ha hecho evidente, especialmente en el armado del plantel y el respeto a su propuesta de entrenador. Según reportes, la directiva teme que si no se llega a un acuerdo, deberá afrontar una salida antes de lo previsto con costes económicos.
Este escenario coloca a Universitario en una encrucijada. Arrancar el proyecto 2026 sin claridad sobre el banquillo amenaza la planificación del tetracampeonato y la participación en la próxima Copa Libertadores.
Si Fossati se va, el club deberá buscar de inmediato un reemplazo capaz de sostener el éxito reciente. La próxima reunión será el instante clave para despejar si “la U” consigue mantener la continuidad del artífice de sus recientes títulos o si deberá activar el plan B.
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