Entrevistamos a la joven escritora Valeria a propósito de su primer libro que se presentará en la FIL Arequipa gracias a Editorial Pandemónium.
¿Cómo nació la novela “Oda a las Polillas”?
Me considero una observadora sensible del entorno, por ello es frecuente que termine recibiendo inspiración de cosas sencillas y cotidianas. El camino creativo de Oda a las polillas comenzó con la repentina aparición de polillas en mi habitación hace ya algún tiempo. Algo en su visita me cautivó y se volvió una necesidad plasmarlas en el arte. El título fue lo primero en lo que pensé. Asimismo, una de mis primeras decisiones fue seguir el deseo que sentía por explorar poéticas y simbolismos en torno a los objetos.
¿Qué te inspiró a crear el personaje de Viorica y su mundo lleno de muñecas y antigüedades?
Es muy importante para mí poder compartir mi voz artística y mi mundo interno. Aún más si se trata de una ópera prima. Fui fiel a todo lo que me representa, a todo lo que amo y me conmueve. Yo también colecciono antiques. Tengo un pequeño mundo en las repisas de mi cuarto. Los objetos viejos, rotos y oxidados son los que más me cautivan. En mi colección tengo vestidos, muñecas, tazas, adornos, juguetes y recuerditos antiguos de bautismo. Todos vienen de fuentes distintas como casas de antigüedades, cachinas, tiendas online y mercados. Muchos los compré, otros los obtuve como obsequios o trueques. Podría decir que las cachinas y casas de antigüedades son mis musas, y que Oda a las polillas es mi corazón en papel. De algún modo, el mundo de Viorica es mi propio mundo y Viorica soy yo.
La atmósfera gótica y melancólica es muy evidente en la obra. ¿Qué autores o estilos literarios influyeron en la creación de este ambiente particular?
Me considero una artista de pensamiento ecléctico. Es por ello que todo lo que me inspira proviene de diversos lenguajes y estilos. Mis referentes son muy abigarrados y diferentes. Siempre busco conectar con todo lo que pasa por mis ojos y llega a mis manos. Encuentro inspiración en objetos dispares entre sí y, de algún modo, logro que sus reminiscencias coexistan en mi escritura. Para Oda a las polillas, encontré inspiración en libros, pinturas, fotografías, esculturas, vestidos, música y filmes. Creo que nunca terminaría de enumerar todos mis referentes. Incluso dudo que pueda reconocerlos todos, pues siento que muchos calan en mí de una manera más sensorial e inconsciente. Algunos autores literarios que inspiraron Oda a las polillas fueron Eugene O’Neill, Emil Cioran, Zoé Valdés, Tennessee Williams, Julia de Burgos, Rosario Ferré y Carlos Fuentes.
¿Cuándo se presenta la novela y qué otros proyectos vienes trabajando?
Por el momento, tengo agendadas dos presentaciones en Arequipa. La primera será el viernes 4 de octubre, a las 17:00 horas, en la Feria Internacional del Libro, y la segunda, el sábado 5 de octubre, a las 16:00 horas, en la Biblioteca Regional Mario Vargas Llosa. Pronto daré más información sobre las actividades complementarias que realizaré antes de viajar a Lima para tener más presentaciones. Estoy trabajando en mis próximos proyectos literarios mientras experimento con la interdisciplinariedad e hibridación artística.
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