Esteban García Figueroa tiene 74 años. Es un adulto alegre y carismático. Su cabello blanco y rostro firme reflejan experiencia. Sus manos están agrietadas, pero limpias y son herramientas prácticas para trozar cualquier variedad de pescado.
Él se dedica a vender productos hidrobiológicos, como lo son la trucha, albacora (otra variedad de pescado), diamante, tollo, bonito, jurel, lenguado, corvina, sargo, langostino, camarón, mixtura, pota, choros, cau-cau.
Los comercializa dentro del mercado San Camilo desde que tenía 36 años de edad. en la sección pescados, si quieren comprar sus productos y escuchar sus consejos puede encontrarlo ingresando por la puerta de calle Piérola y Alto de la Luna.
Don Esteban es reconocido por sus clientes, quienes confían en él y regresan a comprar sin dudar. Su atención es óptima, amable pregunta como desean el pescado, algunos piden fileteado e incluso se da el lujo de recomendar a las personas que cocinar con sus adquisiciones.
Empezó en el negocio a los 36 años, antes de enfocarse en este rubro nos comentó con orgullo que realizó infinidad de actividades, sin embargo, se encariñó con este rubro.
“A este negocio he entrado sin saber leer ni escribir”, expresó.
Todo su conocimiento se lo debe a una señora, con quien sus hermanos mayores trabajaron desde pequeños.
“Ella ha sido prácticamente la que me ha llevado de la mano, me enseño mejor que cualquier familiar”. Nostálgicamente nos comenta que ya falleció en 1983.
EL MADRUGADOR. Don Esteban se levanta, desde hace más de 30 años, a las 3 de la madrugada acude al terminal de Río Seco, lugar de donde muchos comerciantes se abastecen, según nos detalla los productos llegan Ilo, Matarani, Atico, Ocoña y otros lugares. La ganancia para ellos es de 1 a 2 soles, por ejemplo si en el terminal adquirieron a 6 soles, ellos venden a 7 o 8 soles.
“Es impredecible el precio del pescado, hoy puede estar a 5 soles mañana a 10 o 3 soles”, señaló. Actualmente encontramos el bonito y jurel a 8 soles, tollo 20, sargo 30, trucha desde 15, diamante 28, pota 12. Aunque la semana pasada bonito y jurel oscilaban los 12 soles. Pese a los días festivos de San Pedro y San Pablo duda que precios suban.
Don Esteban trabaja hasta las 16:00 horas en el mercado, menciona que casi no descansa. “Yo miro la cama nada más, no tengo muchas horas para dormir”, refiere sarcásticamente y manifiesta estar acostumbrado a su ritmo de vida