Árido y seco es el valle, pero en temporada de verano siempre irrumpen las torrentosas aguas del río que remojan las tierras y cultivos donde se cultivan las uvas y diversos frutales que dan vida a diferentes caseríos en San Juan de Chorunga, distrito de Río Grande, provincia de Condesuyos, que por años celebra a su patrona la Virgen de la Natividad en la hacienda La Capilla de la familia Chirinos.
Diferentes pobladores, cuyas familias se asentaron durante años en este valle conocido por el buen vino como pisco, además de ser una de las zonas más importantes de extracción de oro en el asiento minero de San Juan con más de 15 mil habitantes, regresan siempre en setiembre para participar de las celebraciones de la Virgen de la Natividad y que en esta oportunidad tuvo como mayordomo a Guido Rosas del fundo Huacme.
Antes era un poco difícil llegar hasta La Capilla al existir caminos de herradura en la quebrada; sin embargo, hace más de 2 décadas se construyó una carretera, pero por lo general queda destruida en varios tramos cuando ingresa el río San Juan en enero o temporada de lluvias, producto de los afluentes Piño y Charhuani, ambos que pueden resultar destructivos y que siempre buscan recuperar su cauce.
LA FIESTA. Después de la tradicional víspera con la quema de juegos artificiales y bailar al ritmo de la banda, conocidos de la zona bailaron hasta cerca de las de 2 de la mañana en la pequeña plaza que hay frente al recinto donde está la imagen de la patrona. Durante la noche, los asistentes degustaron de bebidas preparadas en base a pisco y vino.
En el día central, el domingo, diferentes comerciantes se instalaron en los denominados ranchos y ofrecieron platos de comida a los asistentes, quienes comenzaron a llegar caminando y otros lo hacían en vehículos, en su mayoría desde San Juan, Alto Molino, Iquipi, Huaca, Secocha y de localidades cercanas como Huacme, Apillao, Champune, La Concebida, etc.
Así poco a poco los fieles ocupan las bancas del local de La Capilla, mientras la Virgen de la Natividad luce imponente con un manto azul marino, acompañada de flores. Pasan los minutos y se suman mujeres de la zona con vestimenta típica, llamando la atención por sus vistosos colores y sombreros llenos de cintas multicolores. El mayordomo Guido Rosas y familia entra, como también el padre Simón Silloca de la iglesia Santo Rosario de Urasqui-Iquipi comienza la santa misa con la instalación abarrotada.
El sacerdote exhorta a los devotos no alejarse de la fe y acercarse más a la palabra de Dios, especialmente para sanar y superar los problemas que aqueja siempre a las personas. Después da la bendición a todos, no sin antes invitar a todos participar en la procesión.
Una vez acomodada la imagen, la patrona es llevada en hombros por los familiares del mayordomo por el perímetro de la plazoleta y los devotos acompañan a la misma, oportunidad en que se da el reencuentro entre familias que no ocurría durante años.
Una madre ejemplar y que por años está al frente de la hacienda de La Capilla es doña Armandina Téllez Vda. de Chirinos, quien en silla de ruedas y acompañada de su hija Rosa, sorprende a todos con sus 104 años, mientras sus hijos Gustavo, Willy, César, entre otros familiares, también se hacen presentes.
Concluida la procesión, se conoce el nombre del nuevo mayordomo 2025: Papo Huamaní y es felicitado por los presentes, mientras las celebraciones en La Capilla también consideran la fiesta a San José, San Martín de Porres, San Juan de Dios, Cristo Crucificado y Señor de Chorunga. El sábado es la misa de bendición, como la rifa pro embellecimiento del altar mayor de la iglesia de la Capilla de San Juan de Chorunga y cierran las fiestas el domingo con la gran tarde taurina.
El valle de San Juan de Chorunga se encuentra a 6 horas en bus de Arequipa y en la parte alta hay pequeños fundos de agricultores donde se cultivan diferentes productos de pan llevar y varios de ellos tienen sembríos de vid y procesan vino y pisco de calidad, siendo muy apreciados por los lugareños como también en diferentes distritos de la provincia y región. Parte de estos licores abastecen a fiestas patronales como Andaray, Yanaquihua, Chuquibamba o de comunidades de Ispacas, Charco, Salamanca, entre otros.